Logotipo para empresa de fotografía de Zaragoza, formada por dos mujeres, con un estilo muy personal.
Se requería por tanto, que la imagen ofreciera la imagen que ella pretendía. Pura elegancia, dotada de un toque de formalidad, en un envoltorio que reflejara el clasicismo de una época anterior, concrétamente, a la belle epòque, con el que las fotógrafas pretendían captar clientes para, particularmente, realizar trabajos de boda.